Restaurant Brands y Alsea aplican sendos expedientes a 36.000 personas
Las cadenas de restauración preparan una oleada de expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) ante el cierre de su actividad decretado por el Gobierno. Dos de las principales empresas del sector, Restaurant Brands y Alsea, anunciaron sendos ajustes que afectan a 36.000 personas, sumándose a la avalancha de ERTE que las empresas españolas están acometiendo y que ya afectan a más de 100.000 trabajadores.
Parte de la restauración está pendiente de saber cómo el Gobierno flexibilizará este tipo de herramienta, algo que está previsto conocerse hoy en el Consejo de Ministros. Pero dos de las grandes no han esperado.
El ERTE de Restaurant Brands afectará a un total de 14.000 trabajadores en las tres enseñas con las que opera: Burger King, Tim Horton’s y Popeye’s. Principalmente en la cadena de hamburgueserías, que aglutina la mayoría de los más de 500 establecimientos bajo su gestión. Restaurant Brands Iberia explicó que el ERTE se mantendrá “hasta que se restablezca la normalidad”, y que ha sido tomada “tras valorar las mejores alternativas para mantener el empleo tan pronto como finalice esta situación y garantizando la estabilidad de la compañía”.
El coronavirus ha impactado en un momento clave para Restaurant Brands. La firma que preside en España Gregorio Jiménez compró en enero su mayor franquiciado, KAM Food, sumando 70 restaurantes y 1.650 empleados, y preparaba una próxima salida a Bolsa, una idea que dada la situación deberá aplazar. Restaurant Brands también suspendió el servicio de entrega a domicilio de Burger King.
Un proceso similar siguió Alsea, dueña en España del negocio de Domino’s Pizza, Vips, Starbucks o Foster’s Hollywood, entre otras. Esta confirmó un ERTE a toda su plantilla, unos 22.000 trabajadores repartidos entre 1.000 locales, “como consecuencia de la aplicación del estado de alarma que ha decretado el Gobierno”.
En una carta interna enviada por su consejero delegado, Miquel Ibarrola, a la plantilla y a la que accedió CincoDías, este explica que “esta es la única fórmula para garantizar la continuidad de nuestra actividad a largo plazo”.
Otros prefieren esperar antes de tomar decisiones definitivas. Desde McDonald’s, que también cesó ayer el servicio a domicilio además del cierre de sus restaurantes, se explicó a este diario que “estamos en continuo contacto con nuestros franquiciados para consensuar las medidas a adoptar”. A diferencia de lo que sucede con Burger King, en McDonald’s las franquicias acaparan más del 90% de su red de restaurantes, que rondan los 500 en España. “La aplicación de un ERTE no se puede tomar de forma unilateral desde la marca”, subrayaron desde la empresa, que esperará a “poder utilizar las medidas que el Gobierno presentará este martes”.
Desde Foodbox, que opera las marcas Volapié, Santagloria o Mas Q Menos, no se descartaba “la aplicación de aquellas medidas económicas que pueda proponer el Gobierno este martes”. Desde AmRest, la compañía cotizada dueña de La Tagliatella, se limitaron a indicar que se está cumpliendo con las medidas del real decreto. Hostelería de España, la principal patronal del sector hostelero y de restauración, ha pedido al Gobierno medidas como la suspensión de pagos por parte de este a las administraciones, incluidos impuestos, cotizaciones o tasas de autónomos; la suspensión del pago de alquileres o de obligaciones con bancos.
(Noticia extraída de Cinco Días)