La Comision Europea llevará hoy al Eurogrupo un paquete de medidas económicas para hacer frente a la crisis del coronavirus. El Ejecutivo comunitario va a poner sobre la mesa de los ministros de Economía y Finanzas un amplio plan entre los que se incluye acelerar la creación del esquema de seguro de desempleo europeo.
La intención de la Comisión es poder apoyar a las economías nacionales en caso de largos shocks económicos, reducir la presión sobre las cuentas nacionales e incrementar la dimensión social de Europa y la cohesión. Para lograrlo propone acelerar el calendario legislativo de aprobación de esta medida para que pueda servir de apoyo.
Por otro lado, el Ejecutivo comunitario cree que las fuertes caídas en bolsa de cerca del 30% pueden facilitar que tecnología o activos estratégicos para la seguridad nacional puedan acabar fuera del control de la Unión Europea para lo que la Comisión guiará a los Estados Miembros en la implementación de su regulación para supervisar la inversión extranjera directa, como ya hace por ejemplo Estados Unidos cada vez que una empresa europea quiere hacerse con alguna estadounidense.
La Comisión reconoce que esta crisis la llevará directa a la recesión en 2020 porque calcula que tendrá un impacto de 2,5 puntos del PIB, lo que significa que se pasará de una previsión de crecimiento del 1,4% a una de caída del 1% en un escenario base que podría ir a peor si las medidas de contención no funcionan. La UE considera también que en 2021 habrá un rebote de la economía pero menor del previsto.
Para combatirlo, la Comisión Europea ha puesto sobre la mesa un plan para movilizar 37.000 millones con la intención de que el Consejo y el Parlamento Europeo le den rápidamente su visto bueno.
Agilizar la liquidez
Por un lado, la Comisión tira del presupuesto para poner rápidamente 1.000 millones sobre la mesa para que sirvan de garantía al European Investment Fund (EIF). Este dinero procederá de las siguientes partidas: 500 millones del EFSI EU Guarantee se reconduciran al programa COSME (Competitiveness of Small and Medium sized Enterprises) Loan Guarantees; otros 100 millones del EFSI EU Guarantee irán al programa InnovFin SME Guarantees; 250 millones ya están disponibles bajo el programa Infrastructure and Innovation Window of EFSI que será reconducido para apoyar a las pymes, junto con los esfuerzos de entodades de banca nacionales como el ICO y 150 millones que se reubicarán en el fondo EFSI SME Window para apoyos a largo plazo para las pymes.
Asimismo, la Comisión trabaja con el BEI y el BERD para que ambos prioricen en sus financiaciones a los negocios afectados por esta crisis.
El Ejecutivo comunitario propone renunciar a la obligación de solicitar el reembolso de la prefinanciación no gastada para el Fondo de Desarrollo (FEDER), el Fondo Social Europeo (FSE), el Fondo de Cohesión (FC) y el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEM) de donde se conseguirían 8.000 millones. De esta cantidad, 1.161 millones corresponderían a España, lo que podría permitir cofinanciaciones por 4.145 millones a España.
Los Estados miembros utilizarán las cantidades no recuperadas en 2020 -se tenían que devolver este próximo mes de mayo- para acelerar las inversiones relacionadas con el brote de COVID-19.
Los 8.000 millones de euros podrán desencadenar la liberación y el uso de unos 29.000 millones de euros de fondos estructurales en toda la UE, un extremo en el que se espera que juegue un papel clave el Banco Europeo de Inversiones (BEI).
Se propone que el FEDER pueda apoyar la financiación de liquidez para las pymes donde sea necesaria como medida temporal para dar una respuesta eficaz a una crisis de salud pública.
La prioridad de inversión del FEDER será fortalecer la investigación, el desarrollo tecnológico y la innovación para cubrir inversión en productos y servicios necesarios para fomentar la capacidad de respuesta a la crisis.
La Comisión se prepara también para activar el EUSF, el fondo europeo de solidaridad, para que incluya las emergencias sanitarias, lo que permitirá movilizar hasta 100 millones de euros. Este fondo se dedicaba a paliar los efectos de terremotos, inundaciones, erupciones volcánicas o incendios forestales. La intención ahora es incrementar su presupuesto desde los 500 a los 800 millones de euros.
La Comisión Europea también podrá movilizar el European Globalisation Adjustment Fund para poder otorgar 179 millones a los autónomos o desempleados.
Medidas legales de excepción
La Comisión prepara además toda una batería legal al amparo del artículo 107 (3) b del Tratado de la Unión Europea que dice que ” las ayudas para fomentar la realización de un proyecto importante de interés común europeo o destinadas a poner remedio a una grave perturbación en la economía de un Estado miembro” serán compatibles con el mercado único.
Este artículo se utilizó para diseñar en 2009 el llamado “Temporary Framework” para ayudas a las entidades financieras.
La Comisión recomienda a los estados que tomen medidas compatibles como la suspensión de impuestos o tasas, apoyo directo a los consumidores por servicios cancelados (ej. recuperar el dinero de vuelos), compensaciones para los sectores más afectados o eventos cancelados (se han anulado 220 ferias, al estilo de Mobile World Congress este primer trimestre en Barcelona) y ayudas de minimis directas que no requieren aprobación: 200.000 euros a 3 años para cualquier empresa, 100.000 euros a 3 para el transporte y 25.000 y 30.000 euros para agricultura y pesca.
(Noticia extraída de El Economista)