El futuro año 2026 traerá novedades para todos los trabajadores autónomos de España.

Llegan nuevos y muy esperados cambios al mundo de los autónomos y de las pequeñas y medianas empresas de nuestro país. Y es que desde ahora, en 2024, y hasta 2026, se planea un cambio radical debido a la implementación de la factura electrónica de manera obligatoria.

A priori puede parecer un plazo demasiado largo para algo que ya, ahora mismo, en 2024, se ha aprobado como obligatorio. Pero lo cierto es que todos los trabajadores autónomos necesitan un proceso de adaptación para intentar comprender todos los cambios que esto va a suponer, cómo va a afectarles a su día a día en el trabajo y, sobre todo, de qué forma pueden adaptar sus negocios a ello para seguir sacando la rentabilidad necesaria para seguir avanzando.

Siempre es importante tener en cuenta que, aunque sea responsabilidad de un trabajador autónomo estar al corriente de las novedades fiscales que pueden afectarle, hay ayudas que permiten la adaptación a cualquiera de los cambios que surjan en el desarrollo de su trabajo. En este caso se puede contar con el Kit Digital, que no solo aporta información útil sino un apoyo extra para ir adaptando los negocios a las nuevas medidas digitales que van a seguir naciendo con el paso del tiempo y el avance tecnológico.

¿Cuáles son las novedades que, si o si, se deben conocer y tener muy aprendidas de cara al año 2026?

La factura electrónica solo será obligatoria entre empresas y autónomos.

La factura electrónica solamente será obligatoria cuando cuando vaya dirigida a un cliente que sea otro autónomo o una empresa. Esto quiere decir que, en el caso de que la factura sea para un cliente particular, podrá ser una factura física como ha venido siendo hasta ahora.

También es importante recordar que las facturas emitidas a la Administración Públicas deben de ser electrónicas, de forma obligatoria, desde el año 2015, pero hasta ahora los autónomos estaban exentos de tener que enviarlas por esta vía.

Los autónomos deberán tener un software de facturación electrónica

La factura general que hasta ahora usaba cualquier trabajador autónomo, hecha con programas del día a día como Excel, World o PDF ya no será válida a partir de la llegada de la facturación electrónica. Tendrán que aprender a hacer facturas a través de software específicos, como Facturae, por ejemplo, que es el que usa desde hace años la Administración.

Los programas de facturación electrónica van a estar conectados entre sí

En principio se puede elegir cualquier software de facturación, pero debe formar parte de una lista de programas de facturación que estén conectados entre sí, y a su vez estén conectados con el programa de facturación público.

El objetivo de este cambio, que es uno de los más significativos en todo este asunto de la facturación electrónica obligatoria, es precisamente dar pie a que la Agencia Tributaria tenga acceso y control a todas las facturas que se hagan a partir del 2026.

Habrá una solución pública de facturación electrónica gratuita

La conexión entre todos los software de facturación electrónica, privados y públicos, será real, pero los primeros, los privados, probablemente establezcan algún precio para poder ser usados. Mientras tanto, la solución pública de facturación electrónica será completamente gratuita.

La obligatoriedad de mandar a Hacienda una copia de la factura electrónica

Si un trabajador autónomo utiliza un software de facturación electrónica privado, deberá mandar, de forma obligatoria, una copia de cada factura a Hacienda. Esta copia se enviará, efectivamente, a través de la solución pública de facturación electrónica.

Los autónomos van a tener que hacer público el punto de entrada en las facturas

En el caso de que un trabajador autónomo tenga una página web, o un espacio online de negocio, deberá dar información pública sobre el sistema que está utilizando a la hora de facturar electrónicamente. Es decir, deberá aclarar si está usando un software público o privado a la hora de facturar, y de igual manera se lo tendrá que comunicar a todos sus clientes.

Será obligatorio informar de los pagos

En ese sentido, ahora trabajadores autónomos y clientes deberán informar sobre el estado del pago de las facturas que hayan enviado electrónicamente. No obstante, este es un punto que no será completamente obligatorio en 2026, sino que tendrá más margen de tiempo.

La morosidad va a ser castigada

Y a raíz de la información del estado de cada factura, se podrá hacer algo para controlar la morosidad y el impago que continuamente sufren los trabajadores autónomos. El retraso en los pagos, de hecho, conllevará sanciones económicas, tanto a particulares como a la propia Administración, y no podrá excederse de 60 días.

La firma digital también va a ser obligatoria

Si la gran parte de la supervisión de la actividad económica de los trabajadores autónomos va a ser digital, también tendrá que ser digital la firma de cualquier factura. Será obligatorio, por tanto, disponer de DNI electrónico o de Certificado Digital.

Las operaciones intracomunitarias y extracomunitarias quedarán exentas de la norma

Por último, y esto es relevante, todos estos cambios afectaran específicamente a los autónomos que trabajen con clientes dentro de las fronteras de España. Nada relacionado con la obligatoriedad de la factura electrónica afectará a las relaciones con clientes de otros países de la Unión Europea ni del resto del mundo.

(Noticia extraída de Cinco Días)