Sin embargo, la cifra total de empleos indefinidos sigue lejos de los niveles anteriores a la crisis, con cerca de un millón de contratos fijos menos que en el año 2008. La tasa de temporalidad en el mercado laboral español se mantiene en mínimos históricos, por debajo del 27%, sin embargo, la cifra total de ocupados con contrato indefinido aún está lejos de recuperar los niveles previos a la crisis. Los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) recogidos por Servimedia, que corresponden con el tercer trimestre de 2015, muestran que de los casi 15 millones de asalariados, 11,04 millones tiene un contrato indefinido, mientras que algo menos de cuatro millones cuentan con un empleo temporal. Esta cifra mantiene el porcentaje de indefinidos por encima del 73% (73,8%), una cifra inferior a la de trimestres anteriores pero que sigue siendo superior a los registros previos a la crisis. Más contratos temporales Durante los años más duros de la crisis el porcentaje de asalariados con contrato indefinido se disparó debido a que los empleos temporales fueron los primeros que se destruyeron. Sin embargo, la cifra total de empleos indefinidos sigue lejos de los niveles anteriores a la crisis, con cerca de un millón de contratos fijos menos que en el año 2008. La tasa de temporalidad en el mercado laboral español se mantiene en mínimos históricos, por debajo del 27%, sin embargo, la cifra total de ocupados con contrato indefinido aún está lejos de recuperar los niveles previos a la crisis. Los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) recogidos por Servimedia, que corresponden con el tercer trimestre de 2015, muestran que de los casi 15 millones de asalariados, 11,04 millones tiene un contrato indefinido, mientras que algo menos de cuatro millones cuentan con un empleo temporal. Esta cifra mantiene el porcentaje de indefinidos por encima del 73% (73,8%), una cifra inferior a la de trimestres anteriores pero que sigue siendo superior a los registros previos a la crisis. Más contratos temporales Durante los años más duros de la crisis el porcentaje de asalariados con contrato indefinido se disparó debido a que los empleos temporales fueron los primeros que se destruyeron. Desde el segundo trimestre de 2008, momento en el que se alcanzó el pico de empleos indefinidos en España, y comienzos de 2013 desaparecieron casi dos millones de contratos temporales, lo que representa cerca del 40% del total. Esta drástica reducción del empleo temporal elevó el porcentaje de contratos indefinidos hasta situarse por encima del 78%, su máximo histórico. Sin embargo, desde 2013 la recuperación del empleo elevó el porcentaje de contratos temporales y, por ende, redujo la proporción de indefinidos hasta el 73,8% del tercer trimestre de 2015. (Notícia extraída de Expamsión)]]>