Un tercio de los consejeros prevé contratar personal para trabajo en remoto
El 38% de los CEO españoles y el 37% de los ejecutivos a nivel global cree que la mayoría de sus empleados teletrabajará al menos dos días a la semana en los próximos tres años, así lo señala el último informe de KPMG, titulado CEO Outlook 2021. El estudio, cuya muestra fue de 1.325 consejeros, toma el pulso al sector empresarial tras un año y medio de pandemia, destacando ese viraje a la construcción de un entorno laboral más flexible y la confianza en una pronta recuperación económica.
Los datos muestran que España se encuentra un poco por detrás de la media global en los temas que se refieren a la flexibilización del trabajo. De los 50 CEO españoles entrevistados, solo un 34% tiene planeada la contratación de profesionales para trabajo principalmente en remoto, frente al 42% que lo tiene previsto a nivel mundial. En cambio, los ejecutivos españoles están más abiertos a mantener las reuniones de sus equipos directivos de forma virtual (64% frente al 54%). A su vez, el 18% de españoles prevé reducir o ya ha reducido el espacio de sus oficinas, frente al 21% de la media global. También va tres puntos por detrás en la inversión para espacios compartidos, con un 48% frente a un 51%.
Los objetivos de transformación digital de los ejecutivos españoles también muestran una tendencia diferente a la global. El 56% de los CEO españoles priorizará la inversión en el desarrollo de las capacidades y habilidades, y no la inversión en nuevas tecnologías. En cambio, en el resto del mundo es al revés: el 60% destinará más fondos a tecnología que a formación (40%). A pesar de las cifras, la brecha es menor en comparación a 2020, cuando los porcentajes fueron del 67% y el 33%, respectivamente.
Más allá del teletrabajo, el informe muestra un repunte en la confianza del sector empresarial, que a pesar de la variante delta del SARS-CoV-2 ve con optimismo los próximos tres años. Un 80% de los CEO españoles anticipa que la economía nacional mejorará en este periodo y un 62% confía en que lo hará la economía mundial. Este último dato es dos puntos porcentuales superior al global (60%) y duplica las cifras de hace un año.
La esperanza puesta en el crecimiento económico fomenta que el 90% de los CEO españoles crea que sus empresas crecerán en los próximos tres años y que, derivado de ese proceso, se planteen un aumento de sus plantillas: el 86% (88% a escala global) planea contratar más personal entre 2021 y 2024, y un 36% de ellos asegura que el incremento será de más de un 6%.
Las fusiones y adquisiciones (M&A) se contemplan como una solución para capitalizar las oportunidades de crecimiento. En España, el 88% de los CEO (87% a escala global) intentará cerrar acuerdos de este tipo en los próximos tres años. Además, solo el 38% optará por un crecimiento orgánico, apostando por la I+D y la innovación. En contraste, el 62% priorizará alianzas estratégicas (26%), M&A (24%), joint-ventures (10%) y outsourcing (2%).
Preocupación por el impuesto mínimo global
El 82% de los CEO españoles y el 77% a escala global, tiene dudas sobre el impacto que el impuesto mínimo global propuesto por 130 países de la OCDE pueda tener en los objetivos de crecimiento de su organización. El acuerdo se pactó en julio de este año y reforma el sistema fiscal internacional, además de incluir un tipo mínimo del 15% en el impuesto de sociedades. Se sustenta en dos pilares: el derecho de cada país a gravar parte de los beneficios conseguidos por compañías sin presencia física en su territorio y el establecimiento de una base imponible para las grandes multinacionales. En el primer caso se incluye a las multinacionales con ingresos globales superiores a los 20.000 millones y una rentabilidad de más del 10%.
(Noticia extraída de Cinco Días)